Reseña Histórica
Convento e Iglesia de San Pedro Mártir
El 1 de julio de 1955, el Maestro General de la Orden de Predicadores (Dominicos), P Miguel Browne, bendijo y colocó la primera piedra del nuevo convento de San Pedro Mártir. Asistieron a la ceremonia, junto al P. Provincial de la Provincia del Rosario, P. Silvestre Sancho, los superiores de los dominicos en España. Desde el Estudio General de Ávila vinieron los padres Manuel González, Claudio García y Marcos Fernández, entre otros, presididos por el P. Prior de Ávila, P. Narciso Domínguez y el Regente de Estudios P. Bienvenido Turiel. También estuvieron religiosas dominicas de diversas Congregaciones.
El 5 de octubre de 1958 era inaugurado el convento de san Pedro Mártir, al que se trasladaron desde el convento de Sto. Tomás de Ávila, 162 frailes, de los cuales 22 eran sacerdotes, 134 frailes eran estudiantes de filosofía y Teología y 5 hermanos cooperadores
Un año después, el 11 de diciembre de 1959, era inaugurada y bendecida solemnemente la iglesia por el Maestro de la Orden de Predicadores, P. Miguel BROWNE, venido expresamente de Roma, según se puede leer en la inscripción situada a la entrada a la Iglesia:
“D. O. M. A Dios Óptimo Máximo. Ocupando gloriosamente la Cátedra de San Pedro el Papa Juan XXIII, siendo General de la Orden de Predicadores el Rvmo. P. F. Miguel BROWNE, el Provincial de la Provincia del Smo. Rosario de Filipinas, el M. R. P. Silvestre Sancho, estos nobles edificios, construidos por el eximio arquitecto D. Miguel Fisac, para que la Provincia del Smo. Rosario de Filipinas forme como apóstoles a sus miembros, fueron solemnemente bendecidos por el mismo Rvmo. P. M. Browne el III día de los idus de diciembre”
“En una esquina de la que sería la iglesia, cerca de lo que es la entrada del convento, se había ya excavado un hoyo ancho y profundo. Llegada la hora se colocó en él una caja con documentación, objetos religiosos, monedas etc. Y la “piedra angular”. El P. General la bendijo y seguidamente echó sobre la piedra una paletada de cemento. Luego la bajaron mecánicamente los albañiles al fondo del hoyo. Después el mismo P. General echó una palada de tierra o, mejor dicho, de cascajo porque aquello era un cascajal, para cubrir el hoyo. El P Sancho hizo lo propio cargando bien la pala y arrojando su contenido con mucho garbo hacia el hoyo. Del resto se encargaron los albañiles. Unas palabras del P General y del P. Provincial cerraron el acto.” (cfr. Entrevista al P. Claudio en la revista Amanecer nº 6)
Estuvieron presentes, además, el obispo auxiliar de Madrid, Ilmo. Sr. D. José Mª Lahiguera, el obispo D. Francisco Gómez, O. P., el P. Vicario provincial, M. Ferrero, el P. Alejandro Fernández, Provincial de Bética, el P. Manuel Fortea, Vicario prov. de Aragón, el P. Tomás Tascón, secretario general de la Orden, el P. Vicente Rande, ex Provincial de la prov. de Tolosa. Los superiores de nuestras casas en España, muchas religiosas dominicas de varias congregaciones, seglares amigos de la Orden y de la Provincia, entre los cuales se encontraba el Legado de Filipinas en España… Después de la bendición de la Iglesia realizada por el Maestro General, Monseñor José Mª Lahiguera consagró los altares, impartiendo a los presentes la bendición apostólica con indulgencia plenaria. Al día siguiente el P. Maestro General celebró solemnemente la primera misa, asistiéndole como diácono el Provincial de la Bética, y como subdiácono el Vicario del Provincial de Aragón.
Convento de San Pedro Mártir
¿Por qué la construcción de un convento tan grande en las afueras de Madrid?
La respuesta nos la da el P. Claudio García Extremeño, uno de los primeros dominicos que vino al nuevo convento: “en las décadas de los cuarenta y cincuenta del siglo pasado las vocaciones a los seminarios y a las congregaciones religiosas en España fueron muy numerosas, y se esperaba que continuasen siéndolo en el futuro. De hecho, en el nuevo colegio apostólico o seminario menor construidoen Valladolid (Arcas Reales), el número de aspirantes a la Orden ascendía el curso 1954-55 a 415 aspirantes, y el curso siguiente superaba los 500.
El convento de Santo Tomás de Ávila, por otra parte, era la sede del Estudio General de la Provincia donde se cursaban los estudios de Filosofía y Teología. Si perseveraba un tanto por ciento elevado de los aspirantes de Arcas Reales, después de hacer el noviciado en Ocaña (Toledo), sería prácticamente imposible ubicar a todos en dicho convento de Ávila. … Ya antes de la finalización de las obras de Arcas Reales (Valladolid), el P. Provincial Silvestre Sancho con su Consejo determinó trasladar el Teologado de Ávila a Madrid. Entre las diversas opciones que se presentaron se eligió el terreno donde actualmente se encuentra el convento de San Pedro Mártir, hoy Sanchinarro”
La idea, por tanto, era construir un convento para trasladar el Teologado del convento de Sto Tomás de Ávila; de ahí que la obra arquitectónica del convento de San Pedro Mártir fuera denominada “Teologado de los Padres Dominicos”.
Posteriormente paso a ser a ser la sede de los Institutos Pontificios de Filosofía y Teología “Santo Tomás”. Desde entonces se han formado en este convento numerosos sacerdotes para la misión de la provincia, tanto en España como en el Extremo Oriente y Venezuela. Hoy residen en él 25 religiosos dedicados a actividades de enseñanza en centros universitarios y escolares, a la predicación, catequesis, pastoral a diversos niveles, capellanías, asistencia a religiosas e investigación. Es notable la biblioteca por sus abundantes y valiosos fondos bibliográficos sobre filosofía y teología. Aquí se edita la revista “Studium”, de contenido académico.
Parroquia San Pedro Mártir
El día 11 de julio de 2005 la iglesia de San Pedro Mártir era erigida, por decreto del Ilmo. Cardenal Dr D. Antonio María Rouco Varela, parroquia, con el mismo nombre, de la nueva urbanización de Sanchinarro. Un día después, el día 12 de julio, nombraba el primer equipo parroquial, formado por los PP. Fernando Mañero Espinosa, Luis Miguel Martín Moro y Miguel Ángel Medina,
Posteriormente, el 2 de octubre de ese mismo año, se celebraba la inauguración oficial de la parroquia y la toma de posesión del equipo parroquial, a las 19:00 h., en la eucaristía que estuvo presidida por el Ilmo D. José María Bravo Navalpotro, Vicario Episcopal de la Vicaria I de la Archidiócesis de Madrid a la que pertenece esta parroquia.
El 12 de octubre de 2008 se celebraba el 50 aniversario de la inauguración del convento con tres momentos importantes: acto académico, celebración religiosa y un vino español.